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Mereces relaciones amables, y en su justa medida.
Cada uno/a de nosotros/as tenemos una forma única de relacionarnos.
La forma en la que fluye tu energía es fundamental para entender cómo son las más adecuadas para ti.
Sanarnos siempre ha estado en nuestra mano, solo que no lo sabíamos.
El medio siempre ha sido y sigue siendo nuestra propia capacidad creadora.
Y Sanar es recordar eso.
Tu alma está encantada con quien eres. Y aporta energía limpia y luminosa a toda tu experiencia, incluidos tus pensamientos.
Ella repara el cuerpo y la estructura mental.
Una vez que conectas de nuevo con ello y recuerdas, se mantiene, porque es tu esencia que despierta. Y despierta porque ya es hora. Es hora de despertar y permanecer despiertos.